Mi opinión personal: Creo que con decir que ésta película se ha convertido en una de mis preferidas digo mucho. Hacía mucho que estaba buscando una película como ésta, no sé, que dos adolescentes estuvieran perdidos en una isla y se demostraran su cariño. A pesar de que es vieja (Por que es de los años 80) para mí tiene el mismo valor o más que las de la actualidad. Y luego el papelazo que hace Richard es increíble. Sus expresiones, su forma de hablar y quedarse prendado de Emmeline, la forma natural en la que alguien de su edad se enfada. Increíble. He leído que fue una adaptación filmográfica de un libro, pero he estado buscando y no lo he encontrado. Aunque no he cesado con mi búsqueda, me haría muy feliz encontrar el libro y leerlo. Con sólo ver la película el libro me da muy buena chispa.
Emmeline es morena de ojos azules, guapísima, una modelo quinceañera en otras palabras. Su papel como actriz no me llegó tanto como el de Richard, pero está bastante bien. Y luego los conflictos que surgen entre ambos parecen tan reales que hacen la película muy realista para estar dentro de un escenario fantástico, y ese puntazo me ha encantado. Es lo que más busco en las películas y también en libros. Richard es rubio de ojos azules, de 19 años. (Es que Richard se ha convertido para mí en un platónico, lo mismo que para muchas Leonardo DiCaprio por la película Titanic.
En la película es jovencísimo y guapísimo, pero ahora, los años han pasado y pues no es el mismo. Lo mismo ha pasado con Richard, que ahora tiene 50 y pico años) Y es que me he obsesionado hasta tal punto con esta película que hasta me sé las edades que tenían los personajes en 1980, que es cuando se publicó la película. Están los típicos temas que se abordaban en aquella época. Se tenía muy en cuenta a Dios, a Jesús.
Casi la mitad de la película transcurre cuando ellos no eran más que un par de niños. Aunque claro, la película no es muy larga, dura una hora y media más o menos.
El barco está a punto de explotar así que el cocinero salva a los niños en una barca. El padre de Richard (que por cierto es el tío de Emmeline, si no oigo mal, porque le llamó tío. Es que eso quiere decir que eran primos ¡Y se enrollaron! Tío no, para mí no es que sea muy normal) fue en otra barca pero había niebla y no se encontraron. Los niños estuvieron navegando unos días con el cocinero hasta llegar a la Isla. Allí aprendieron a hacerse una casa de palos de bambú, cosas que encontraban en la Isla y las cosas básicas que tendrían que aprender para poder sobrevivir en aquel lugar.
La otra mitad de la película ya transcurre cuando son adolescentes. Imaginaros a vosotros con vuestros habituales problemas adolescentes, y añadidle a eso que estáis perdidos en una isla en medio del océano con alguien que os atrae. El escenario es difícil de recrear, por lo que, cuando se añaden aspectos por los que los adolescentes pasan y los típicos problemas que se crean, dentro del escenario fantástico, todo parece muy creíble.
Y es que luego ocurre algo inesperado, y es extraño, porque no saben absolutamente nada. Entonces tú estás detrás de la pantalla en plan "PERO TÍO, COMO NO VAS A SABER ESO, QUE ES LÓGICO, AMOS A VER".
La película se hace corta, en cuanto te das cuenta ya ha terminado y quieres volverla a ver. Hay una segunda y una tercera parte. Yo sólo he visto la segunda, ya que la tercera no tenía ni ganas, pero de las dos primeras me quedo con la primera, sin duda alguna. Mi calificación personal con respecto a esta película es algo obvia, pero es que me ha encantado.
CALIFICACIÓN PERSONAL: 5/5.
